Rebeca Plana: Begin the Beguine

Alejandro Guijarro: 36 Views from Within

En Begin the beguine, la primera exposición de Rebeca Plana como artista de la Galería, pueden verse una serie de diez obras inéditas, de gran formato realizadas exclusivamente para esta muestra en el último mes y que representan lo que todos deseamos: volver a empezar.

Las nuevas pinturas de 195 x 162 cm revelan la impronta gestual tan fluida y rápida que caracteriza a la artista cuya forma de trabajar es muy directa y fresca. Han sido pintadas sobre lino, un soporte totalmente nuevo para la artista y que a pesar de considerarlo complejo, admite que “tiene mucha presencia” y confirma su interés y su curiosidad por el uso de diferentes materiales.

Destaca la diversidad de colores utilizados y de su importancia a la hora de transmitir numerosas sensaciones. Son el reflejo de lo que los “inputs” que recibe la artista en el día a día. Vuelve, por ejemplo, a ese verde con el que se siente tan cómo da trabajando y con esa “magia tan maravillosa”. Retoma también el naranja fluorescente que según ella pone de manera latente y que proporciona esa luz tan necesaria hoy por hoy en contraste con otros colores más tormentosos.

Podemos hablar de Rebeca Plana como una artista informalista y sus pinturas son el reflejo de su carácter pasional y arrebatado. Ella misma considera que su esencia está en la pintura, por ende pinta porque tiene que pintar y puede hacerlo desde la “mala leche” pero siempre tiene que ser en condiciones de sosiego: “me gusta decir que pinto desde el estomago y no del corazón, porque la rabia te sale desde las tripas, aunque vayas aprendiendo a controlar”.

En este periodo de amplia incertidumbre, cada uno se centra en lo que sabe hacer y Rebeca Plana sabe pintar y plasmar su sentir. Ella vuelve a empezar.

El fotógrafo Alejandro Guijarro, para la exposición en la galería Álvaro Alcázar, nos ofrece 36 imágenes donde nos muestra la fotografía en su intersección con otros medios como la pintura o el grabado. Su proceso creativo revela una técnica muy afín con la pintura surrealista: la decalcomanía.

Esta técnica tan utilizada por artistas como Óscar Domínguez o Max Ernst, entre otros, es conocida como uno de los llamados procesos de pintura mecánica o automática.  Utilizando un tipo de película instantánea ahora obsoleta y sus químicos de procesado como pigmentos, Alejandro Guijarro lleva esta técnica al terreno de la fotografía desdibujando la linea entre lo real y lo ficticio, entre lo tangible y lo imaginado: «este trabajo establece un espacio ficticio. Desde mi estudio, documento el mundo con los ojos cerrados”.

El artista rompe con los límites de la imagen fotográfica y crea una relación fragmentada entre el objeto y su representación.  Se cuestiona así la realidad y subjetiva aún más su experiencia visual. De este modo, el artista logra crear una serie de paisajes que homenajean a Katsushika Hokusai y sus 36 vistas del Monte Fuji. Él lo considera un viaje interior a través de paisajes que incluso tienen un recorrido geográfico y nos invita a nosotros como espectadores a crear nuestro propio viaje.

CATÁLOGO
DOSSIER PRENSA REBECA PLANA
DOSSIER PRENSA ALEJANDRO GUIJARRO